Indudablemente que si hay crisis política, de valores, y de principios, En Venezuela vemos como hay partidos históricos en franca, aunque lenta mejoría, y observamos otros modernos que van a su desaparición lenta pero progresiva.
El caso es que estas organizaciones sociales se han divorciado de la realidad del elector, y voy mas allá: del ciudadano común cumplidor de sus deberes y derechos.
En el panel electoral compuesto por Oficialismo, y “sus constitucionales traidores”, la Oposición y sus legales disidentes; los abstencionistas tradicionales, y por supuesto los impredecibles NI-NI continúan con esperanzas de “un nuevo liderazgo”, o tal vez, ya que no hay los esperados lideres, nuevos mensajes para nuevas esperanzas, el descontento crece y las organizaciones políticas no interpretan esas variables estadísticas. Los candidatos y sus organizaciones están pensando como ellos y no como los electores, y mucho menos como los ciudadanos.
Según estudios de opinión en 28 ciudades del país, 9 de ellas en el Zulia, vemos como la composición estadística además de confusa, es vulnerable. Las razones entran en la lógica conceptual de “la nueva esperanza… el nuevo deseo… la satisfacción del re-encuentro…” no se trata de ganar por ganar por que el triunfo es la excepción ya que lo normal es tener mas derrotados. Hay malos candidatos que ganan elecciones pero fracasan en sus gestiones ya que sus métodos no se ajustan a la cientificidad, y esto es gravísimo!... La finalidad del líder es acumular mas votos duros que adversidad o indiferentes asegurando autentica mayoría. Hay carencia de líderes en la arena política actual.*
En resultados preliminares de estudios tecnopolíticos con ingredientes DAFO, llevados al tetrángulo y el oblongo circunstancial de este momento, buscando sus variables, y covariables, varianzas y resultas, observamos que el oficialismo y la oposición bailan como pareja “la balada de los derrotados”. El triunfo sería entonces para la abstención!
Y es que ningún sector está entendiendo la psicología política del votante y algunos se acobijan cual cobardes a la sombra de un “líder o porta-aviones decayente”, y otros a las tradiciones caudillistas. pareciera que los dilemas y “trilemas” son parte de un guion teatral para las batallas del PSUV, y para las vocerías de la MUD.*
Aun ganado como se gane y quienes resulten victoriosos, hasta los proclamados están hoy en la balanza de los derrotados. Líder en Política es el que acumula mayor entendimiento, seguimiento, y esto se traduce en votos.
Para ambos adversarios (me niego al término de enemigo) su realidad está llena de aspectos superficiales sin dar base, cimiento y solidez a una candidatura pre-electoral, desestimando con irrespeto al pueblo llano, necesitado de una auténtica propuesta electoral que le garantice su “estado de Derecho”, y su bienestar. Todo mensaje político tiene un destinario y un fin especifico. Eso nos dice la experiencia.*
El cerebro registra y codifica en una minifracción de segundo lo que desea de “su candidato” y de acuerdo a sus intereses y necesidades particulares, sin importar si es de izquierda o es de derecha.
Conocemos de candidatos, y de gobernantes que saben “positivar su rechazo en su momentum”, pero eso les tiene un techo según nuestros estudios FODA, y se pueden sumar negativamente a los aspirantes o acompañantes, cosas de imagen pública, diría Fanny Rincón.
Ya lo decía Forero, y también Eskibel, y de otra forma David Axelrod: el manejo del “tricerebral” es sumamente importante en toda campaña del tipo que sea. Y es que estos políticos no pueden entender eso dejando a un lado a sus aduladores?. Lo que activa el cerebro son los problemas y de inmediato, sus soluciones si las hay, y si están “personificadas, mucho mejor!”*
Excluir en estos momentos el veneno es sumamente importante, esta bueno de adulaciones y círculos cerrados de partidarios-focas. Es necesario los sistemas radares de medición de acuerdo a cada objetivo y varemos de gestión.
El cerebro se cierra a lo que no le interesa, y eso pasa en fracciones de segundo, el mismo cerebro trivializa lo tradicional sin darle jerarquía. De allí que hay que saber ubicar el mensaje, el momento, el tono y el foro, creando asi la pertinencia social efectiva (no solo electoral ni efectista).*
Al elector actual, y sobretodo los nuevos votantes, en mayor o menor grado no les interesa si es de derecha o es de izquierda, les interesa verse identificados con un personaje, con una propuesta viable que le dignifique y supere “sus problemas, nuestros problemas, los problemas de la Patria”. Pero eso no se ve, no se siente, no se digiere, y por tanto, crece el veneno de la abstención si no se cambian algunas estrategias para ganar-ganando!*
Periodista/director de ESECA
@AmenhotepPlanas
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